Crowcon - Detección de gas que salva vidas
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ESTUDIO DE CASO
Crowcon mantiene la seguridad de los trabajadores sanitarios y los pacientes en la primera línea de Covid-19

La pandemia de Covid-19 puso al límite tanto al sistema sanitario como a sus trabajadores, y la gestión del oxígeno en los hospitales se convirtió en un reto particular para los sistemas sanitarios de todo el mundo. Este estudio de caso presenta salas de hospital de varios hospitales del NHS Trust, en las que había una gran dependencia de oxígeno en las salas de cuidados intensivos y Crowcon proporcionó un detector Gasman para apoyar la detección de O2.

Desafíos del enriquecimiento de oxígeno

Crowcon suministró más de 16 kilómetros de tuberías al Hospital Nightingale, que da servicio a 4.000 camas. Sin una detección precisa de O2, las fugas provocarían un enriquecimiento de O2 que pondría en peligro tanto a los profesionales sanitarios como a los pacientes. Incluso con fugas, el riesgo es mayor en este entorno
debido al gran volumen de ventiladores en un espacio cerrado que también podría causar una atmósfera enriquecida.

El enriquecimiento de oxígeno es el término que suele utilizarse para describir situaciones en las que el nivel de oxígeno es mayor que en el aire. El oxígeno es incoloro, inodoro e insípido, lo que significa que no es fácilmente detectable por los sentidos humanos cuando está en presencia de una atmósfera enriquecida con oxígeno. El enriquecimiento de oxígeno puede provenir de varias fuentes, como válvulas con fugas, conexiones deficientes, apertura de válvulas deliberada o accidentalmente, no cerrar las válvulas correctamente después de su uso, utilización de un exceso de oxígeno en la soldadura, el corte con llama o procesos similares en los que hay una ventilación deficiente y se está utilizando oxígeno.

El enriquecimiento de oxígeno supone un riesgo de incendio cuando los niveles de O2 aumentan sólo un 24%. No sólo existe un mayor riesgo de ignición, sino que el resultado general es el de una llama más feroz y una mayor velocidad de combustión, en la que la extinción de la llama podría resultar casi imposible. En un entorno hospitalario, esto supone una grave amenaza para los que trabajan en el entorno, pero también para los que intentan ayudar a apagar el fuego. El principal peligro para las personas de una atmósfera enriquecida con oxígeno es que la ropa o el pelo pueden incendiarse fácilmente, causando quemaduras graves o incluso mortales.

Nuestra contribución

Según las orientaciones enviadas a los equipos de los hospitales por NHS England y NHS Improvement, la densidad de los ventiladores podría "enriquecer" el aire con oxígeno y aumentar el "riesgo de combustión". Debido al aumento del uso de oxígeno y de equipos de ventilación en el marco de la pandemia, en ocasiones los hospitales tuvieron que adaptar las áreas para su uso en caso de emergencia, lo que supuso un problema de tiempo y de baja ventilación. En consecuencia, se ordenó a los centros hospitalarios que llevaran a cabo una supervisión periódica de las "salas potencialmente expuestas" para "garantizar el control del enriquecimiento de oxígeno".

El equipo de Crowcon aceptó el reto tras ser contactado por uno de los hospitales del Reino Unido que se preparaba para aumentar las instalaciones de cuidados intensivos. Entrando en acción, Crowcon dio prioridad a la fabricación de 30 detectores de O2 portátiles para apoyar a nuestros valiosos trabajadores sanitarios y garantizar la entrega más rápida posible. Hicimos un esfuerzo adicional produciendo un número de pieza especial para el NHS, de modo que las unidades pudieran suministrarse con el "pitido de confianza" desactivado. Esto garantizaba que las unidades no emitieran este sonido. Gracias a ello, Crowcon también fue aceptado como proveedor en el sitio web de la cadena de suministro COVID del Gobierno.

El O2 Gasman proporcionó protección a los cuidadores y a los pacientes gracias a su tamaño pequeño, ligero y fácil de usar. El Gasman pudo colocarse junto a los ventiladores en todas las salas para monitorizar la zona siguiendo las directrices del NHS. Como el dispositivo puede funcionar sin problemas hasta dos años, sin necesidad de enchufarlo para obtener alimentación constante ni siquiera para cargarlo, el detector garantiza que la atención se centre plenamente en el cuidado de los pacientes. Los niveles de alarma se ajustan a las directrices más recientes del 23,5% de oxígeno.

En pocas palabras

Los entornos de oxígeno enriquecido plantean graves riesgos para quienes se encuentran en ellos, por lo que la gestión del oxígeno en los hospitales era clave para prevenir este peligro real. Nuestro O2 Gasman proporcionó protección a todos los que se encontraban en el entorno sanitario y Crowcon se enorgullece de haber hecho un esfuerzo adicional para ayudar a los trabajadores de primera línea. La producción del número de pieza especial del NHS para desactivar el "pitido de confianza" permitió la entrega rápida de un producto de detección muy necesario para salvaguardar en última instancia a los que más importan durante Covid-19.

Lea el estudio de caso completo 

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