El dióxido de cloro es un gas de color naranja a amarillo, con un fuerte olor a cloro. Es conocido por sus características desinfectantes y antibacterianas, concretamente por su capacidad para limpiar el agua potable y destruir las bacterias.
Gas de color naranja a amarillo, con un fuerte olor a cloro.
Nocivo en grandes volúmenes, causando el mayor daño a la piel, el sistema nervioso, los ojos y el sistema respiratorio.
En el caso de la piel que ha estado expuesta al dióxido de cloro, deben iniciarse inmediatamente los procedimientos de saneamiento, para limpiar la piel con agua y/o jabón suave.
Un detector multigás que ofrece soporte para 5 gases, así como un modo de comprobación previa a la entrada y una función de bomba opcional.
Un detector de un solo gas compacto y totalmente reforzado para los entornos industriales más duros.